Un día aprendí
que la desesperación es el lugar común
de todos los cambios
y he visto como el destino
se quiebra y llora
para volver a mi en forma
de noche es espesa
de viento sur
de soledad ajena
la tristeza y el miedo
se pegan al tiempo
a las cosas
y al recuerdo
pero sólo cuando el camino desaparece
comprendo lo que fueron.
25 febrero 2018
22 febrero 2018
Viento Sur
Llegó el viento sur como una marea oscura que avanza en el cielo de la noche. Hacía tiempo que la angustia no era mi naufragio. Imagino que está bien, uno no puede transitar esta vida que nos toca tan tranquilamente, al menos no con un pedacito pequeño y desdibujado de alma. No sería justo.
La única salvación que conozco es no doblegarme a la desesperación. Se quedan los miedos, las sombras y los rincones. Se queda la soledad, esa pegajosa tristeza que se pega a las cosas y al tiempo.
La única salvación que conozco es mirarme en este espejo, a lo ojos, bien adentro y recibir lo que el viento de la noche me trae desde lejos.
La única salvación que conozco es no doblegarme a la desesperación. Se quedan los miedos, las sombras y los rincones. Se queda la soledad, esa pegajosa tristeza que se pega a las cosas y al tiempo.
La única salvación que conozco es mirarme en este espejo, a lo ojos, bien adentro y recibir lo que el viento de la noche me trae desde lejos.
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